INTRODUCCIÓN

Brindar un servicio profesional destinado a individuos requiere de mucha responsabilidad, compromiso y una gran preparación para hacerlo, tal es el caso en un servicio de orientación educativa.

En el presente trabajo se muestran las principales características que se requieren para que las  personas encargadas puedan realizar este servicio satisfactoriamente.

La información, es representada gráficamente, en ella se encuentra el perfil profesional necesario, las experiencias previas que se deben de poseer, así como los conocimientos, habilidades, actitudes, competencias, atributos, ética profesional, código deontológico, responsabilidades y funciones que éste debe desempeñar.

La finalidad de presentar tal información, es con la intención de tener en cuenta los requisitos necesarios para llevar a cabo este servicio que no depende de cualquier profesionista, sino, de aquellos que realmente cumplan con el perfil y competencias que se requieren para sobrellevar cada acción en su campo laboral. Trabajo que sin duda necesita de mucha sensibilidad y delicadeza, por el hecho de estar en contacto continuo con personas y sus diferentes necesidades psicosociales.

Los datos han sido rescatados de una lectura previa del libro Lineamientos de Orientación Educativa de la Secretaria de Educación Pública.

CONCLUSIÓN

Los responsables del Servicio de Orientación Educativa son profesionales que valoran las habilidades, aspiraciones, preferencias y necesidades del alumnado, así como los factores ambientales, sociales y externos que intervienen en la toma de decisiones de los alumnos. (SEP, 2010).

Por lo tanto ellos, son quienes además de proveer herramientas para el apoyo escolar, es necesario brindar información relativa a las ocupaciones y pasatiempo del interés para el alumnado, siendo que lo más importante es saber qué es lo que al alumno lo hace sentirse feliz. De modo que su servicio siempre va a consistir principalmente en proporcionar consejo y asesoría hacia él.

Hoy en día, el servicio de orientación educativa se ha visto presente en los diferentes niveles educativos, las necesidades del alumnado y problemáticas diagnósticadas han requerido de soluciones que mejoren la calidad de vida de estas personas. Y la respuesta a ello a sido favorable, puesto que se ha convertido en un apoyo para el docente de las aulas, por el hecho de no disponer de suficiente tiempo para contrarestar las dificultades que puedan presentar los alumnos  en ese momento, ya sean de tipo cognitivo, emocional o social.

Sin duda, como interventores educativos tenemos una gran misión, no es fácil, pero cubriendo todo lo que se requiere para ejercer la profesión en este servicio de orientación estoy segura que se hará una gran labor.